La empresa de servicios de transporte Uber está probando un coche que permite la conducción sin ningún piloto a bordo. El modelo del coche es un Ford modificado, con cámaras, sensores y un radar Lidar girando en el techo. El objetivo es reemplazar a los conductores de sus taxis por la tecnología de de conducción autonómica.
El coche ya se ha descubierto circulando por las calles de Pittsburg, en Estados Unidos.